miércoles, 29 de julio de 2015

Paisaje 320


Se acabó el momento de esperar
Termino toda posibilidad absoluta de rebanar el trozo más grande de la torta
Ya no basta con rezar suplicas que se lleva el contaminado viento
Se secan las raíces que conectan mi cuerpo con la sangre derramada de la ñuke mapu desahuciada
El trasporte solo nos lleva a un futuro sin resguardo de la divinidad liberada
Se finalizó la esclavitud impuesta por garrote y castigo
Es el trigo quien pide al silencio un grito desesperado que rasgue la cotidianidad humana
Aceptada sin previa arcada
Conciencia prostituta y manufacturada
Hoy todos pensamos madre in usa
Desde hace muchas décadas que ya nadie es dueño de lo que pasa por su cabeza
Ni de las sensaciones absorbidas por alguna extremidad de su cuerpo
Se busca libertad por debajo del cemento
Donde duerme la tierra
Prisionera del progreso cabrón y tuerto
Mientras los ciegos controlen los medios para llegar al cielo
Seguirán los pobres acumulándose en el infierno
Premonición de todo lo que pudieron haber hecho mientras respiraban las partículas enajenadas del oxígeno pantanoso que hemos creado sin muchos negativos lamentos
En la melancolía duermen las energías que destruyen las bellas estrellas que impiden ver la luz realmente significativa
Para cada uno de los cuerpos oscuros
Compuesto solo de nudos forjados por viejos canutos
Buscan enmudecer los humos negros de la juventud pre-cocida
Los caldos artificiales le dan un sabor regular a todo lo que se despega de la norma
Es la iglesia aquella luz opaca impide disfrutar la puesta de sol por las madrugadas invertidas
Son las lluvias amurradas quienes construyen murallas en cada hembra y macho enajenada y enajenado.
La fiesta continúa por sobre la atmósfera modificada
Se camina de espaldas mientras los pensamientos son violados
Por algún letrero poco certero de la realidad real de cada alba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario